Por Giress Guerra En la música cristiana pesada, la escena del metalcore es una de las más activas, según he podido apreciar. La cantidad de bandas es impresionante y cada vez aparecen nuevos músicos con deseos de comunicar verdades bíblicas usando este género. Hoy les presento a Then Its End, una agrupación de Iowa, Estados Unidos. Se formó con la unión de distintos músicos de bandas que se habían separado, así que no es descabellado pensar que de aquí saldría algo bueno, y vaya que se cumplieron las expectativas. Restored es su álbum debut y solo lo puedo clasificar con 2 palabras: Puro Metalcore. Se trata de guitarras, bajos y baterías a todo tren, sin efectos electrónicos ni teclados abundantes para adornar la producción; esto llega al oyente de forma cruda y sin filtros. Pero lo que destaca aquí es el equilibrio que logran entre caos y melodía. Cuando lo escuches notarás como su ritmo es agresivo, directo, o sea, lo que se espera de un subgénero del hardcore, pero ahí es...